
La miel de abeja tiene vitaminas C, D y E por lo que funciona como regeneradora de células de la piel, se la utiliza para sanar heridas. Varios de los productos dermatológicos que están hoy en día de venta en el mercado contienen miel de abeja, debido a sus múltiples cualidades curativas.
En cuanto a la alimentación, la miel tiene un alto grado nutricional al ser un concentrado natural de minerales tales como potasio, fósforo, calcio, hierro, 35% de proteínas y la mitad de todos los aminoácidos, incluyendo el complejo B. Además, proporciona energía, ya que va directamente al torrente sanguíneo y purifica la sangre. Por último, la viscosidad junto con los minerales es excelente para problemas de tos, gripes y garganta.
No perdemos nada al utilizar productos naturales, al no ser químicos, no corremos riesgo alguno. Así, recurramos a la naturaleza que siempre ha sido sabía, para prevenir o curar enfermedades que a final han sido causadas por la culpa del hombre.